El P. Bernardo Cervellera, experto en la Iglesia Católica en China y editor de la agencia de noticias Asia News, informó el pasado 3 de abril que "en muchas diócesis la Asociación Patriótica y la Oficina de Asuntos Religiosos siguen exigiendo a todos los sacerdotes que se inscriban en la Asociación y sostengan la 'Iglesia independiente'. Al respecto el Vaticano ha expresado una tímida reserva en una entrevista del Cardenal Fernando Filoni concedida al (diario del Vaticano) L'Osservatore Romano, subrayando que la pertenencia a la Asociación según la ley china debería ser facultativa".
En China existe la Asociación Patriótica Católica China, controlada por el gobierno; y la Iglesia clandestina o subterránea, que se ha mantenido siempre fiel a la Santa Sede.
El editor de Asia News precisó que, por ejemplo, "en la Diócesis de Mindong, la Oficina de Asuntos Religiosos está llamando uno a uno a todos los sacerdotes clandestinos o subterráneos (fieles a la Santa Sede), que son la mayoría, y les exige que se inscriban en la Asociación Patriótica. De otro lado deben dejar sus parroquias y su ministerio".
En la práctica, afirma el P. Cervellera, más que "reconciliación" entre la Asociación Patriótica y la Iglesia clandestina o subterránea, con el acuerdo provisional entre China y el Vaticano para el nombramiento de obispos "hay una gran presión sobre la comunidad subterránea con una fuerte intromisión en la vida de la Iglesia".