La Arquidiócesis de Guayaquil (Ecuador) y la Junta de Beneficencia de la ciudad, bajo el movimiento "Bebés en los corazones de Jesús y María", darán sepultura a los niños no nacidos en un espacio especial en el Panteón Metropolitano.
La iniciativa nace de la necesidad de brindar una sepultura digna a aquellos bebés que por diferentes circunstancias no llegaron a nacer; siendo una obra de misericordia corporal, que posee una fuerte dimensión espiritual, al ampliar el acto de rezar por el alma de los difuntos.
Esta idea, complementa el trabajo que realiza Proyecto Esperanza, apostolado que acoge y acompaña a aquellas madres que perdieron a sus bebés por un aborto inducido o espontáneo, siendo parte de este proceso de acompañamiento, la reconciliación y el encuentro de la familia con el hijo que no pudo nacer.