Una multitud de feligreses se reunió en la Catedral Basílica de Nuestra Señora del Valle para celebrar el centenario de la diócesis de Catamarca con una solemne Eucaristía presidida por el Arzobispo de Santiago de Chile, Cardenal Javier Errázuriz Ossa.
El Purpurado chileno, designado legado pontificio para la celebración, visitó la Ermita de la Virgen en Valle Viejo, y la Casa Natal de Fray Mamerto Esquiú. Luego, llegó a la catedral para la Misa concelebra con varios obispos.
El Cardenal Errázuriz pidió en su homilía a Nuestra Señora del Valle que "abra nuestra inteligencia y nuestros corazones para que escuchemos las palabras de vida eterna de su querido Hijo, dispuestos a comprenderlas y a cumplirlas, como ella siempre lo hizo como su Madre y su Discípula primera".