El Papa Francisco nombró hoy al Arzobispo de Buenos Aires (Argentina), Mons. Mario Aurelio Poli, Ordinario para los fieles católicos de ritos orientales residentes en la Argentina y que se encuentran desprovistos de Ordinario de su propio rito.

Mons. Poli sucede en el cargo al Papa Francisco, quien fuera Arzobispo de Buenos Aires hasta su elección como Sumo Pontífice.

El Ordinariato Oriental de la República Argentina fue erigido el 17 de mayo de 1859 por el Papa Pío IX, buscando la atención pastoral de los fieles católicos de ritos orientales, desprovistos de Ordinario propio en ese país.

En Argentina existen 6 comunidades de católicos orientales: ucranios, armenios, maronitas, melquitas, rusos y rumanos. Las cuatro primeras cuentan hoy con Ordinario propio, de manera que el Ordinariato Oriental atiende a la pastoral de los fieles católicos rumanos y rusos de rito bizantino.

Desde fines del siglo XIX llegaron a Argentina fieles ortodoxos y católicos de diversas nacionalidades.

La Misión católica rusa en Argentina está unida a las preocupaciones de la Compañía de Jesús, que a través del Pontificio Colegio Russicum, de Roma gestionó la fundación de misiones en diversas partes del mundo.

Argentina resultó así un centro para la inmigración de exiliados de Europa Oriental, durante la época de la posguerra, en que cualquier Iglesia en la Unión Soviética parecía estar condenada a la muerte.

Muchos rumanos también recurrieron a Argentina después de la II Guerra Mundial. Si bien la mayoría de los rumanos son ortodoxos, teniendo en cuenta sus necesidades religiosas y los respectivos cánones, son recibidos en la Misión católica.