La iniciativa "Amazonía Casa Común", que se realiza en Roma en el contexto del Sínodo de la Amazonía, emitió un comunicado como respuesta al robo de cinco tallas de madera de una polémica imagen femenina en su sede de la iglesia de Santa María en Traspontina por parte de desconocidos que, posteriormente, se grabaron en video arrojándolas al río Tíber.
"Lamentamos profundamente y a la vez denunciamos que en los últimos días, hemos sido víctimas de actos de violencia, que reflejan la intolerancia religiosa, el racismo, actitudes vejatorias, que sobre todo afectan a los pueblos indígenas, y demuestran una negativa para construir nuevos caminos para la renovación de nuestra Iglesia", indican en el comunicado.
Las imágenes robadas y arrojadas al río muestran a una mujer embarazada desnuda que, según algunos representaría a "Nuestra Señora de la Amazonía", aunque otros han afirmado que es un símbolo de la fertilidad y de la madre tierra.