4 de noviembre de 2015 / 09:45 AM
La Fiscalía de menores de Vigo amparó la decisión de la menor de 15 años de abortar a pesar de la oposición de sus padres. Tras la reforma de la ley Aído que realizó Mariano Rajoy, las niñas de 16 y 17 años deben tener el consentimiento de sus padres para abortar. Sin embargo en este caso, la juez de familia del Juzgado de Primera Instancia de Vigo consideró que la menor se encontraba en una "situación de riesgo de exclusión social y de inminente peligro por el conflicto con sus padres", por lo que autorizó el aborto.
Los padres de la menor habían denegado su consentimiento al aborto de la niña y habían manifestado su voluntad de hacerse cargo del bebé cuando naciera.
Polonia Castellanos, presidenta de Abogados Cristianos, afirma que están "perfilando una querella porque consideramos que la juez en este caso ha prevaricado". Los motivos de esta prevaricación serían que al ser menor siempre se debe velar por "el superior interés del menor", pero "en este caso hacer que una menor aborte no pensamos que sea velar por el superior interés del menor, cuando está demostrado que el aborto tiene una cantidad de secuelas tanto físicas como psíquicas que afectan a un porcentaje muy elevado de mujeres".