Una multitud inesperada de más de dos millones y medio de fieles se sumó este martes a la peregrinación al Santuario de la Virgen de Zapopan, que cerró el segundo día de deliberaciones del XLVIII Congreso Eucarístico Internacional.
La tradicional caminata, que acompaña a la Virgen de Zapopan a lo largo de los doce kilómetros que separan la Catedral de Guadalajara de su Basílica, cubrió de fieles la mitad del camino.
El recorrido, en el que participaron decenas de cardenales, arzobispos, obispos y sacerdotes participantes del Congreso, se convirtió en una fiesta multicolor de fe gracias a la habitual presencia de 15 mil danzantes y cientos de niños de los diversos coros infantiles de la región.