Durante una audiencia privada concedida al Cardenal José Saraiva Martins, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el Papa Benedicto XVI dio su aprobación a numerosas causas de beatificación, incluyendo el impresionante número de 149 mártires de la Guerra Civil española –incluyendo una laica– y un misionero italiano asesinado en el Congo.
El Santo Padre aceptó los siguientes decretos de martirio:
Siervos de Dios Enrique Sáiz Aparicio, español, (1889-1936) y 62 compañeros, de la Sociedad Salesiana de San Juan Bosco, asesinados en 1936 y 1937. El P. Sáiz impidió heroicamente que los milicianos socialistas asesinaran a los novicios, a quienes dejaron libres.