El Obispo de Pinar del Río (Cuba), Mons. Jorge Enrique Serpa, afirmó que no se puede pretender la paz sin respeto a la dignidad de la persona y que el ser humano es libre cuando dice lo que piensa.

“La libertad es el derecho que todo hombre tiene de ser honrado y a pensar y hablar sin hipocresía. Un hombre que oculta lo que piensa no es un hombre honrado, no es un hombre libre”, expresó el Prelado citando el libro La Edad de Oro del prócer cubano José Martí.

Durante la Misa de la Paz celebrada el 1º de enero, el Obispo explicó que la palabra “paz” es “fácil de escribir, pero difícil de grabar en el corazón. Construir la paz es obra de paciencia y generosidad de corazón, destruirla es más fácil y se hace muchas veces por caprichos ideológicos e intereses personales que hay que superar (…)  para ser verdaderos instrumentos de paz”.

Según informó el sitio web del Episcopado cubano, Mons. Serpa invitó a los fieles que repletaron la catedral a desarrollar todo el potencial humano existente y diverso en formas de pensar que existe en Cuba, para organizar mejor el país y conseguir el bienestar de toda la población.

“Si no se desarman no sólo las manos, sino también las mentes, las conciencias y los corazones, estaremos siempre a expensas de que la Paz se pierda”, advirtió el Obispo de Pinar del Río, que recordó que la paz es un don de Dios y por tanto a Él debemos “recibirlo en nuestros corazones y testimoniarlo en la vida, de manera particular en este Año de la Fe”.