El vaticanista y bloguero católico italiano, Andrea Tornielli, hizo una serie de cuestionamientos luego de los funerales del “padre” de la pornografía italiana, Riccardo Schicchi, en el que tomaron la palabra desde el púlpito de la iglesia para defender este género varios actores porno como Ilona Staller, conocida como la “Cicciolina”.

Tornielli relata que el 11 de diciembre se realizaron en una iglesia católica de Roma los funerales de Schicchi, presidido por el sacerdote Francesco Bartolucci, en los que participaron “como era comprensible” varios actores porno como la exposa del fallecido, Eva Henger.

El vaticanista afirma que en las exequias, algunos de los actores porno aún en actividad, “se colocaron en fila para recibir la comunión”.

Al final de la Misa, la Cicciolina se paró ante el púlpito y dijo, hablándole al fallecido rey de la pornografía: “hemos hecho tanta poesía, se puede decir, porque si bien era erotismo y pornografía, para nosotros era poesía… Jugando hemos hecho lo que, tal vez, muchísimas personas tenían miedo de hacer”.

Antes de la Cicciolina habló también desde el púlpito el actor porno Rocco Siffredi, quien afirmó que “me dicen que he facilitado el porno, pero yo no he hecho nada para eso. Ricardo inició esto y es gracias a él que estoy aquí y que yo soy lo que soy”.

Dirigiéndose al sacerdote Bartolucci, Andrea Tornielli comenta “ha hecho bien, creo, en celebrar las exequias solicitadas por la madre de Schicchi. No sabemos cómo vivió el rey del porno su enfermedad, cómo se ha preparado para la muerte que no le ha llegado de improviso”.

“Creo además que el sacerdote romano no podía hacer otra cosa al momento de la comunión, aunque sería interesante que se pusiera en el pellejo de los hombres y mujeres divorciados y vueltos a casar que ven estas imágenes de la comunión, estando ellos excluidos del sacramento”.

“Pregunto –concluye Tornielli– ¿era realmente necesario que la Staller y Sifredi hablasen desde el púlpito reivindicando en la Iglesia que la ‘facilitación’ del porno era el principal mérito del difunto? ¿No se pudo evitar eso Padre Bartolucci?”.