Verónica Cardona, una joven colombiana de 21 años que se negó a abortar el bebé concebido tras ser violada por su propio padre, pidió a los gobernantes y congresistas peruanos que defiendan el derecho de las mujeres "a ser madres y a levantarnos todos los días con un abrazo de nuestros hijos".
En declaraciones a ACI Prensa el 12 de noviembre, Verónica pidió a las autoridades gubernamentales que "no se lucren mas con el dolor de las mujeres, con la muerte de inocentes".
Las mujeres, indicó, "queremos proyectos que nos ayuden económicamente, proyectos que mejoren nuestra salud, educación y bienestar", señaló.