Obispado rechaza y lamenta masacre de 10 campesinos en Colombia

El Obispado de Santa Rosa de Osos en el departamento de Antioquia (Colombia) rechazó y lamentó la masacre de 10 campesinos que concluían sus labores diarias, perpetrada ayer por desconocidos.

Según señalan los medios locales, el miércoles 7 de noviembre los campesinos habían terminado sus labores y fueron retenidos por un grupo de desconocidos, que podrían pertenecer a la banda "Los Rastrojos".

Miembros de esta banda se presentaron hace un par de días en la vereda (pequeño pueblo) Aguaditas del distrito de San Isidro en Antioquia, para amenazar a los trabajadores porque el dueño de la finca en la que trabajaban no pagaba una "vacuna" (extorsión).

Los campesinos fueron asesinados con la detonación de una granada en la finca, dedicada a la siembra de tomates de árbol, para luego ser rematados con armas de largo alcance. Uno de ellos sobrevivió y es atendido en un hospital local.

El gobierno ha ofrecido una recompensa de hasta 50 millones de pesos (unos 28 mil dólares) por información para esclarecer el crimen que mantiene atemorizada a la población de Santa Rosa de Osos, según indicó el secretario de Gobierno de Antioquia, Santiago Londoño.

Sobre estos lamentables hechos, el Obispo de Santa Rosa de Osos, Mons. Jorge Alberto Ossa Soto, emitió un comunicado hoy en el que se "rechaza y lamenta el vil e inhumano hecho en el que fueron asesinados un grupo de personas campesinas trabajadoras e indefensas de nuestra diócesis".

Tras hacer un llamado a las autoridades para defender la vida y los derechos de los ciudadanos, el Prelado pide que "estos hechos de barbarie no queden en la impunidad".

El mensaje concluye con la censura y un llamado "a la conversión a los autores materiales e intelectuales de este crimen" para luego expresar su cercanía con los deudos de los asesinados, al tiempo que eleva oraciones por las víctimas y por el restablecimiento de "la justicia, la paz y la concordia".