Al llegar hoy a Varsovia con motivo de una visita apostólica de cuatro días a Polonia, el Papa Benedicto XVI afirmó al ser recibido por miles de personas entre las que se encontraban autoridades civiles y eclesiales del país, haber llegado a la tierra de Juan Pablo II “para seguir las huellas de mi gran predecesor”.
"He venido para seguir las huellas de mi gran predecesor, el Papa Juan Pablo II", dijo el Santo Padre en un polaco muy correcto que suscitó el entusiasmo de las miles de personas que acudieron al aeropuerto internacional de Okęcie para recibirlo esta mañana.
En la ceremonia de bienvenida al Pontífice estuvieron presentes el Presidente de Polonia, Lech Kaczynski y su esposa Maria, así como el Arzobispo primado de la Iglesia en el país, Cardenal Jozef Glemp, el Presidente de la Conferencia Episcopal Polaca, Mons. Józef Michalik, y quien fuera durante años secretario personal de Juan Pablo II, el Arzobispo de Cracovia, Cardenal Stanislaw Dziwisz, entre otros.