Jueves 21 de febrero


Evangelio según San Mateo, capítulo 7, versículos del 7 al 12

Poder de la oración.

7 "Pedid y se os dará; buscad y encontraréis; golpead y se os abrirá. 8 Porque todo el que pide obtiene; y el que busca encuentra; y al que golpea, se le abre. 9 ¿O hay acaso entre vosotros algún hombre que al hijo que le pide pan, le de una piedra; 10 o si le pide un pescado, le de una serpiente? 11 Si, pues, vosotros, que sois malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¡cuánto más vuestro Padre celestial dará cosas buenas a los que le pidan! 12 Así que, todo cuanto queréis que los hombres os hagan, hacedlo también vosotros a ellos; ésta es la Ley y los Profetas".

Comentario

7. Sobre estas inefables promesas en favor de la oración, que Jesús hace tan reiteradamente, y que nosotros miramos con tan poca fe, véase 21, 22; Marc. 11, 24; Luc. 11, 9; Juan 14, 13; Sant. 1, 6 y 4, 3, etc.

11. A los que le pidan: es decir que, no obstante saber bien el Padre cuanto necesitamos (6, 32), se goza en recibir el pedido de sus hijos. Dará cosas buenas: véase Luc. 11, 13: "Si pues vosotros, aunque malos, sabéis dar buenas cosas a vuestros hijos, ¡cuánto más el Padre dará desde el cielo el Espíritu Santo a quienes se lo pidan!".

12. Es la regla de oro que Jesús nos ofrece para guía de nuestra conducta. Nótese su carácter positivo, en tanto que el Antiguo Testamento la presentaba en forma negativa (Tob. 4, 16; Luc. 6, 31; Hech. 15, 29).

Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios