Viernes 16 de agosto

Evangelio según San Mateo, Capítulo 19, versículos 3-12

3 Entonces, algunos fariseos, queriendo tentarlo, se acercaron a Él y le dijeron: "¿Es permitido al hombre repudiar a su mujer por cualquier causa?". 4 Él respondió y dijo: "¿No habéis leído que el Creador, desde el principio, "varón y mujer los hizo"? 5 y dijo: "Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne". 6 "De modo que ya no son dos, sino una carne. ¡Pues bien! ¡Lo que Dios juntó, el hombre no lo separe!" 7 Dijéronle: "Entonces ¿por qué Moisés prescribió dar libelo de repudio y despacharla?" 8 Respondióles: "A causa de la dureza de vuestros corazones, os permitió Moisés repudiar a vuestras mujeres; pero al principio no fue así. 9 Mas Yo os digo, quien repudia a su mujer salvo el caso de adulterio, y se casa con otra, comete adulterio, y el que se casa con una repudiada, comete adulterio". 10 Dijéronle sus discípulos: "Si tal es la condición del hombre con la mujer, no conviene casarse". 11 Pero Él les respondió: "No todos pueden comprender esta palabra, sino solamente aquellos a quienes es dado. 12 Porque hay eunucos que nacieron así del seno materno, y hay eunucos hechos por los hombres, y hay eunucos que se hicieron tales a sí mismos por el reino de los cielos. El que pueda entender, entienda".


Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios