Feria

noviembre 19, 2013

Color: Verde

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    II Macabeos 6:18-31

    18A Eleazar, uno de los principales escribas, varón de ya avanzada edad y de muy noble aspecto, le forzaban a abrir la boca y a comer carne de puerco. 19Pero él, prefiriendo una muerte honrosa a una vida infame, marchaba voluntariamente al suplicio del apaleamiento, 20después de escupir todo, que es como deben proceder los que tienen valentía rechazar los alimentos que no es lícito probar ni por amor a la vida. 21Los que estaban encargados del banquete sacrificial contrario a la Ley, tomándole aparte en razón del conocimiento que de antiguo tenían con este hombre, le invitaban a traer carne preparada por él mismo, y que le fuera lícita; a simular como si comiera la mandada por el rey, tomada del sacrificio, 22para que, obrando así, se librara de la muerte, y por su antigua amistad hacia ellos alcanzara benevolencia. 23Pero él, tomando una noble resolución digna de su edad, de la prestancia de su ancianidad, de sus experimentadas y ejemplares canas, de su inmejorable proceder desde niño y, sobre todo, de la legislación santa dada por Dios, se mostró consecuente consigo diciendo que se le mandara pronto al Hades. 24«Porque a nuestra edad no es digno fingir, no sea que muchos jóvenes creyendo que Eleazar, a sus noventa años, se ha pasado a las costumbres paganas, 25también ellos por mi simulación y por mi apego a este breve resto de vida, se desvíen por mi culpa y yo atraiga mancha y deshonra a mi vejez. 26Pues aunque me libre al presente del castigo de los hombres, sin embargo ni vivo ni muerto podré escapar de las manos del Todopoderoso. 27Por eso, al abandonar ahora valientemente la vida, me mostraré digno de mi ancianidad, 28dejando a los jóvenes un ejemplo noble al morir generosamente con ánimo y nobleza por las leyes venerables y santas.» Habiendo dicho esto, se fue enseguida al suplicio del apaleamiento. 29Los que le llevaban cambiaron su suavidad de poco antes en dureza, después de oír las referidas palabras que ellos consideraban una locura; 30él, por su parte, a punto ya de morir por los golpes, dijo entre suspiros: «El Señor, que posee la ciencia santa, sabe bien que, pudiendo librarme de la muerte, soporto flagelado en mi cuerpo recios dolores, pero en mi alma los sufro con gusto por temor de él.» 31De este modo llegó a su tránsito. (No sólo a los jóvenes, sino también a la gran mayoría de la nación, Eleazar dejó su muerte como ejemplo de nobleza y recuerdo de virtud.)

  • Salmo Responsorial

    Salmo 3:2-7

    2Yahveh, ¡cuán numerosos son mis adversarios, cuántos los que se alzan contra mí! 3¡Cuántos los que dicen de mi vida: «No hay salvación para él en Dios!» 4Mas tú, Yahveh, escudo que me ciñes, mi gloria, el que realza mi cabeza. 5A voz en grito clamo hacia Yahveh, y él me responde desde su santo monte. 6Yo me acuesto y me duermo, me despierto, pues Yahveh me sostiene. 7No temo a esas gentes que a millares se apostan en torno contra mí.

  • Evangelio

    Lucas 19:1-10

    1Habiendo entrado en Jericó, atravesaba la ciudad. 2Había un hombre llamado Zaqueo, que era jefe de publicanos, y rico. 3Trataba de ver quién era Jesús, pero no podía a causa de la gente, porque era de pequeña estatura. 4Se adelantó corriendo y se subió a un sicómoro para verle, pues iba a pasar por allí. 5Y cuando Jesús llegó a aquel sitio, alzando la vista, le dijo: «Zaqueo, baja pronto; porque conviene que hoy me quede yo en tu casa.» 6Se apresuró a bajar y le recibió con alegría. 7Al verlo, todos murmuraban diciendo: «Ha ido a hospedarse a casa de un hombre pecador.» 8Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: «Daré, Señor, la mitad de mis bienes a los pobres; y si en algo defraudé a alguien, le devolveré el cuádruplo.» 9Jesús le dijo: «Hoy ha llegado la salvación a esta casa, porque también éste es hijo de Abraham, 10pues el Hijo del hombre ha venido a buscar y salvar lo que estaba perdido.»