Las iglesias cristianas de Kiev (Ucrania) se han convertido en las últimas semanas en hospitales clandestinos, según informó el Arzobispo Mayor de Kyiv-Halych, Mons. Sviatoslav Shevchuk, los templos abrieron sus puertas a los manifestantes del movimiento Maidan y desplegaron un sistema de traslado clandestino de heridos, por temor a las represalias del gobierno.
Mons. Shevchuk, quien preside la Iglesia Greco-Católica en este país, explicó el 25 de febrero desde la sede de Radio Vaticano en Roma, que las diferentes confesiones cristianas del país han superado sus diferencias y se han unido para asistir al movimiento Maidan, gravemente atacado por el ejército ucraniano, al que se refieren como "el cuerpo sufriente de Cristo".
Las iglesias "hemos sido mediadores de paz y, como buena Madre, la Iglesia ha hecho todo lo posible para salvar a sus hijos, para cubrirlos con su manto y salvar sus vidas", afirmó Mons. Shevchuk.