Al llegar de Roma, una de las primeras actividades que realizó el Administrador Apostólico de Santiago de Chile, Mons. Celestino Aós, fue reunirse con las tres víctimas del exsacerdote condenado por abuso sexual a menores, Fernando Karadima.
Tras el encuentro, José Andrés Murillo manifestó que con el gesto del Prelado se "abre un camino hacia adelante y esperamos que se transforme en acciones para todos" los que "han sido víctimas, que han vivido situaciones abusivas en muchos planos y que están esperando un gesto".
"Siempre decimos que las palabras se acabaron, que la Iglesia llegó tarde", que son necesarias las "acciones" pero "la verdad es que esto, de venir para acá, es una acción", dijo agradecido Murillo.