El tráfico de personas ha crecido como negocio de internet durante la pandemia del COVID-19, denunció el observador permanente de la Santa Sede, Mons. Janusz Urbanczy, que también pidió no dejar de combatir las raíces de este flagelo calificado por el Papa Francisco como "vergüenza para la humanidad".
El representante vaticano dijo estas palabras el 15 de octubre durante la 1285° Reunión del Consejo Permanente de la Organización para la Seguridad y la Cooperación de Europa (OSCE), que está centrada en la lucha contra el tráfico de personas.
"La pandemia actual de COVID-19, debido a los cierres y otras restricciones impuestas en muchos países, proporcionó a los delincuentes la transformación de la trata de personas en un negocio de Internet en constante crecimiento", expresó Mons. Urbanczy.