La muerte de Ana Laura Almirón Riquelme, una niña de 6 años que esperaba un trasplante de corazón, alentó la redacción de un proyecto de ley de donación de órganos en Paraguay que permita dar vida a quienes aún tienen esperanza.
Ana Laura sufría de miocarditis dilatada por lo que un trasplante de corazón era la única posibilidad para seguir viviendo. A pesar de que hubo personas que podían ser donantes, las familias no quisieron ceder los órganos.
De esta forma, la pequeña falleció el 10 de abril de 2013 luego de esperar casi dos años la llegada del corazón.