En su intervención esta mañana en la sede de la FAO en Roma, el Papa Francisco aseguró que el hambriento, a quien los estados deben prestar siempre atención, "nos pide dignidad, no limosna".
"Mientras se habla de nuevos derechos, el hambriento está ahí, en la esquina de la calle, y pide carta de ciudadanía, ser considerado en su condición, recibir una alimentación de base sana. Nos pide dignidad, no limosna", dijo el Papa ante los aplausos de los presentes en la Sala de la Plenaria de la FAO.
El Santo Padre participó esta mañana en la II Conferencia Internacional sobre nutrición de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, conocida como FAO, que se celebra en Roma desde el miércoles y finalizará este viernes.