27 de mayo de 2020 / 10:45 AM
Durante la Audiencia General de este miércoles, el Papa Francisco advirtió nuevamente sobre el peligro de secundar las insinuaciones del diablo, ya que consentir las tentaciones causan un mal pago.
"No se olviden de esto. El tentador es un mal pagador, paga mal", advirtió el Pontífice durante su catequesis en italiano dedicada a la oración "de los justos" y al reflexionar en el episodio de la Biblia que relata la historia de dos hermanos: Caín y Abel.
Tras comentar algunos detalles de este episodio localizado en capítulo 4 del libro del Génesis, el Santo Padre explicó que Caín tenía envidia de su hermano Abel. "El gusano de la envidia, aún siendo él el primogénito, ve a Abel como un rival, uno que socava su primacía. El mal aparece en su corazón y Caín no consigue dominarlo".