La Provincia Mercedaria en Chile informó que recibió una denuncia por abuso sexual en contra del sacerdote fray Arturo Galaz, fallecido en 2002.
A través de un comunicado del 26 de marzo, la institución explicó que los antecedentes fueron recibidos inicialmente en la Diócesis de Rancagua y derivados a la Provincia.
"Los mercedarios hemos acogido al denunciante y se ha dispuesto iniciar un estudio exhaustivo con el fin de esclarecer los hechos y recibir posibles nuevas denuncias", señaló.
Asimismo, aclaró que "hemos colaborado con la justicia civil entregando todos los antecedentes del caso a la Fiscalía de O'Higgins".
La Provincia Mercedaria en Chile expresó su "profundo dolor por los hechos denunciados y hemos manifestado nuestra cercanía y solidaridad a la víctima". Finalmente hizo un llamado a colaborar a quienes tengan algún antecedente sobre estas u otras denuncias a través del correo recepcionyescucha@mercedarios.cl
"Reafirmamos nuestro compromiso y el trabajo pastoral para generar en nuestras comunidades y en la sociedad toda una cultura de respeto y resguardo de los niños, niñas, jóvenes y adultos vulnerables, para que sean tratados con la dignidad que merecen como hijos e hijas de Dios", concluye su comunicado.
El 3 de agosto de 2018, en su declaración de decisiones y compromisos, la Conferencia Episcopal de Chile (CECh) resolvió dar a conocer públicamente toda investigación previa que se realice cuando se exista algún presunto caso de abuso sexual contra menores de edad en alguna diócesis.
El Episcopado pidió a los superiores de las congregaciones religiosas proceder de la misma manera.
El sacerdote chileno Cristóbal Lira, discípulo cercano de Fernando Karadima, fue suspendido de su ministerio por tener en su contra tres acusaciones de abuso de poder y otra de abuso sexual hacia un sacerdote.
Este domingo 24 de marzo el nuevo administrador apostólico de la Arquidiócesis de Santiago de Chile, Mons. Celestino Aós Braco, aseguró en su primera Misa que los abusos cometidos por miembros del clero son “injustificables e intolerables” y que las víctimas serán atendidas.
La Compañía de Jesús en Chile sancionó al sacerdote Juan Pablo Cárcamo por hechos que no se acreditaron como delitos canónicos, pero que son considerados “transgresiones de naturaleza sexual”.
