El Papa Francisco rezó este sábado 30 de julio por el fin de la violencia y el terrorismo en el mundo, ante las reliquias de los beatos Michele Tomaszek y Zbigneo Strzalkowski que fueron asesinados en 1991 por el grupo terrorista Sendero Luminoso en Perú.
Estos jóvenes mártires fueron recordados en la ceremonia de acogida de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Cracovia 2016, realizada el jueves 28 de julio en el Parque Jordan en la localidad de Blonia.
Antes de dirigirse al Campo de la Misericordia para presidir la Vigilia de oración con 1,6 millones de jóvenes reunidos por la JMJ, el Pontífice se detuvo en la Iglesia San Francisco para rezar unos minutos.