7 de abril de 2016 / 10:30 AM
Durante la Misa matutina en la Casa Santa Marta, el Papa Francisco afirmó que así como se dice que "la patria tiene necesidad de héroes", la Iglesia tiene hoy necesidad de "testigos, de mártires", porque ellos "son la sangre viva de la Iglesia" y quienes la llevan adelante testimoniando a Jesús resucitado.
En su homilía, el Santo Padre reflexionó sobre la primera lectura tomada de los Hechos de los Apóstoles y que habla del valor de Pedro, quien tras la curación del lisiado, anuncia la Resurrección de Jesús ante los jefes del Sanedrín que, enojados, quieren darle muerte.
Francisco recordó que a Pedro se le había prohibido predicar en el nombre de Jesús, pero él sigue proclamando el Evangelio, porque, dice el apóstol, "es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres". Este Pedro "valiente" no tiene nada que ver con "Pedro, el cobarde" de la noche del Jueves Santo, "cuando lleno de miedo reniega tres veces al Señor", indicó el Papa.