En Santo Domingo (Ecuador), se inauguró el 10 de diciembre la primera "Cuna de Vida" del país, proyecto que busca luchar contra la muerte de niños recién nacidos por abandono, brindando un lugar seguro donde las madres puedan dejarlos de manera anónima.
Este proyecto ha sido creado por las Hermanas Benedictinas Misioneras del Hogar Valle Feliz y consiste en un centro de acogida para menores de 0 a 17 años. Nació como respuesta a la pocas medidas de protección que existen en el país para los recién nacidos que son abandonados, normalmente en situaciones que ponen en riesgo sus vidas.