Los terroristas del Estado Islámico reivindicaron el atentado perpetrado la noche de Año Nuevo en un bar de Estambul en Turquía en el que murieron al menos 39 personas y otras 69 resultaron heridas.
2017 inició con un atentado en Estambul que dejó 39 muertos. Aquí lo que sabemos hasta ahora https://t.co/S1VnzxvZ95 pic.twitter.com/eGnKFDlrSp
- CNN en Español (@CNNEE) 1 de enero de 2017
El atentado ocurrió en el bar Reina, un conocido local de la ciudad turca en el que un hombre disfrazado de Papá Noel abrió fuego con un arma de largo alcance ante las personas que estaban allí.
Según informa el New York Times, el Estado Islámico (ISIS) publicó este lunes 2 de enero una declaración en la que señalan que el ataque fue perpetrado "continuando las benditas operaciones" que los terroristas "realizan contra Turquía, el protector de la cruz".
"Un soldado héroe del califato atacó uno de los clubes nocturnos más famosos donde los cristianos celebraban su fiesta pagana", indica el texto.
La declaración también señala, aparentemente en referencia a Siria, que "el gobierno de Turquía debe saber que la sangre de los musulmanes, a quienes tiene como objetivo con sus planes y armas, ocasionará un incendio en su país por voluntad de Dios".
Una agencia estatal informa que por este hecho ya han sido detenidos 8 sospechosos, aunque la búsqueda por el responsable del atentado aún prosigue.
Al conocer la noticia del atentado, el Papa Francisco expresó su "cercanía al pueblo turco, rezo por las numerosas víctimas, por los heridos y por toda la Nación en luto".
También pidió "al Señor que sostenga a todos los hombres de buena voluntad que se ponen valientemente en marcha para hacer frente a la plaga del terrorismo y a la mancha de sangre que envuelve al mundo en una sombra de miedo y desconcierto".
Este atentado se produce una semana después del asesinato a tiros en Ankara del embajador ruso en Turquía por parte de un terrorista islámico, como venganza por la intervención de las fuerzas armadas rusas en Siria en la lucha contra el Estado Islámico y otros grupos yihadistas.
El Santo Padre expresó su solidaridad con Turquía y alentó a que este 2017 la no violencia permita avanzar hacia la búsqueda de la paz.
"El año será bueno en la medida en que cada uno de nosotros, con la ayuda de Dios, trate de hacer el bien cada día. La paz se construye diciendo 'no', con hechos, al odio y a la violencia, y diciendo 'sí' a la fraternidad y a la reconciliación", dijo.
El pasado 20 de diciembre, en un telegrama enviado al Arzobispo de Berlín tras el atentado perpetrado en esa ciudad que dejó al menos 12 muertos, el Santo Padre expresó su deseo de que "la locura homicida del terrorismo no encuentre más espacio en nuestro mundo".
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