El P. Marco Rufini, párroco de Nursia, señaló que no será fácil levantar el centro de Italia luego del fuerte terremoto de ayer domingo, sin embargo, afirmó que en medio del desastre, "el hecho que estemos todos vivos tiene algo de milagroso".
Ayer 30 de octubre un sismo de 6,5 golpeó las regiones de Umbría y Marche –se sintió también en Roma–, dejando miles de refugiados y varios heridos. Sin embargo, hasta el momento no se han reportado fallecidos.