Así, dijo que en Hong Kong y en China continental los cristianos están buscando en el Vaticano un liderazgo moral.
"El Vaticano solo puede depender de su virtud y poder moral para convertir al pueblo chino de la dictadura del ateísmo. Los chinos buscan fe, además de su vida material. Lo que les falta no es material, porque China ciertamente ha mejorado la riqueza y los medios de vida de las personas en los últimos 40 años. Cuanto mayor éxito material tienen, más vacío sienten en su corazón", dijo Lai.
En ese sentido, añadió que el vacío moral en China debe ser llenado por el catolicismo para así enseñar a la gente que "la vida es más que pan".
El pueblo chino, dijo, "quiere religión, lo que más quieren es virtud y moral para vivir una vida significativa, lo cual el Vaticano no les está dando", sino que más bien "les está quitando cuando se alinean con el PCCh, que los ha reprimido en su búsqueda espiritual. Esto es realmente ridículo. Esto es algo muy decepcionante".
Hong Kong es una "región administrativa especial" de China, lo que significa que tiene su propio gobierno pero permanece bajo control chino. Fue colonia británica hasta 1997, cuando fue devuelta a China bajo el principio de "un país, dos sistemas", que permitía tener su propia legislatura y sistema económico.
La apertura de Hong Kong al mundo exterior y la transparencia en la regulación comercial y bancaria, en contraste con China continental, la ha convertido en un centro de negocios, banca y finanzas globales.
Las protestas a favor de la democracia en Hong Kong, en las que participaron muchos católicos y cristianos de otras confesiones, rechazaron con éxito los esfuerzos de la legislatura el año pasado para aprobar un controvertido proyecto de ley que habría permitido a China continental extraditar a presuntos delincuentes de Hong Kong.
Con la aprobación de las nuevas leyes de seguridad, el Gobierno comunista chino tomó más poder para reprimir las protestas en Hong Kong, que ve como un desafío directo a su poder.
Se han propuesto anteriormente reglas de seguridad similares.
En 2003, el régimen comunista intentó utilizar los propios consejos legislativo y ejecutivo de Hong Kong para aprobar las medidas contra la sedición, pero las protestas masivas llevaron a los legisladores a abandonar la propuesta.
El 27 de mayo, el Departamento de Estado de EE. UU. anunció que, a la luz de las acciones de China, ya no reconoce a Hong Kong como políticamente autónomo de China, una designación que la región ha disfrutado según la ley estadounidense desde 1992.
Traducido y adaptado por Eduardo Berdejo. Publicado originalmente en CNA.