En la meditación que ofreció este martes 20 de septiembre en la Basílica inferior de Asís en Italia, el Papa Francisco afirmó que todos los cristianos "estamos llamados a ser 'árboles de vida', que absorben la contaminación de la indiferencia y restituyen al mundo el oxígeno del amor".
La meditación comenzó con una lectura en inglés del capítulo 55 del libro de Isaías en la que el profeta afirma "a todos los sedientos: Venid a las aguas; y los que no tienen dinero, venid, comprad, y comed. Venid, comprad, sin dinero y sin precio, vino y leche (…) Inclinad vuestros oídos, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros un pacto eterno".
La meditación comenzó con una lectura en inglés del capítulo 55 del libro de Isaías https://t.co/mC6fkJEThz pic.twitter.com/8pFT10XLpB
- ACI Prensa (@aciprensa) 20 de septiembre de 2016