El Congreso Nacional de Honduras rechazó con 79 votos despenalizar el aborto en el marco de la reforma del Código Penal, tal como pretendían los promotores de esta práctica para los casos de violación, deformación del feto y riesgo de la salud de la madre.
Actualmente el Código Penal señala que "el aborto es la muerte de un ser humano en cualquier momento del embarazo o durante el parto".
En ese sentido, castiga a quien "intencionalmente cause un aborto" con una pena de tres a seis años "si la mujer lo hubiese consentido"; seis a ocho años si se realiza "sin el consentimiento de la madre y sin emplear violencia o intimidación"; y con ocho a diez si se "emplea violencia, intimidación o engaño".