VATICANO,
Este domingo 16 de junio, fiesta del padre en muchos países del mundo, el Papa Francisco visitó la diócesis italiana de Camerino afectada gravemente por un terremoto en 2016.
En primer lugar, el Santo Padre visitó las casas de varias familias que perdieron todos sus bienes materiales y que tuvieron que ser desplazados.
Sin embargo, Francisco fue recibido con mucha alegría, conmoción y con la gran hospitalidad característica del pueblo italiano.
La primera casa que visitó fue la única en la cual el Pontífice aceptó algo de comer tras la insistencia de la señora anfitriona. El Papa pidió una galleta, "la más pequeña", y la comió de pie junto al Obispo local, Mons. Francesco Massara, mientras bromeaban con los anfitriones.
Como es natural, las diferentes familias que recibieron al Santo Padre le confiaban sus historias, muchas relacionadas al sufrimiento del terremoto que causó la pérdida de sus casas.
Además, algunos de los ancianos le compartieron al Papa sus problemas de salud y le mostraron también fotos de sus familiares, incluso le presentaron a su mascota.
Las familias en #Camerino describían al #PapaFrancisco sus historias al perder todo con el terremoto y sus problemas de salud. "¿Cómo se hace?" le preguntó un anciano y el #Papa daba la clave: "no pierdan la esperanza". pic.twitter.com/oWs4D1wKF4
- Mercedes De la Torre (@mercedesdelat) 16 de junio de 2019
El Santo Padre escuchaba con atención sus historias y, en varias ocasiones, les destacó la importancia de no perder nunca la esperanza y los bendijo a cada uno.
Después de visitar seis casas, el Papa Francisco dirigió un breve saludo a las numerosas personas reunidas a quienes les impartió su Bendición.
"Me gustaría visitar cada casa, quiero decirles que soy cercano a todos ustedes, que rezo por ustedes para que esta situación se resuelva lo más pronto posible. Gracias por su paciencia y valentía. Recen por mi", les pidió el Papa. Luego, continuó a saludar personalmente y a bendecir a muchas de las personas presentes.
Rezo en la Catedral
Posteriormente, el Santo Padre se trasladó a la Catedral de Camerino en donde lo esperaban afuera muchas otras personas.
Antes de entrar a la Iglesia, el Papa Francisco saludó también al personal sanitario, voluntarios y socorristas.
Después de visitar a familias afectadas por el terremoto, el #PapaFrancisco fue a la Catedral de #Camerino y rezó con devoción ante esta estatua rota de la Virgen María a la cual entregó un ramo de flores. Cobertura: @aciprensa @EWTNVatican pic.twitter.com/dGXPslPT5L
- Mercedes De la Torre (@mercedesdelat) 16 de junio de 2019
Finalmente, Francisco entró a la Catedral y observó varias partes destruidas. Después, rezó con devoción ante una estatua rota de la Virgen María y dejó un ramo de flores. Luego, el Santo Padre se trasladó a la cercana Plaza Cavour para celebrar la Santa Misa, en este domingo de la Santísima Trinidad.
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