BUENOS AIRES,
"¿Queremos ser libres de verdad? Abramos el corazón a Jesús que quiere nacer en esta vida y en nuestro corazón", fue el mensaje de Mons. Gabriel Mestre, Obispo de Mar del Plata (Argentina) a un grupo de mujeres de la cárcel, reunidas para celebrar la Misa de Navidad.
La celebración se realizó en la Unidad Penitenciaria 50 de Batán, en la Diócesis de Mar del Plata, donde también hubo tres bautizos, cinco confirmaciones y cuatro primeras comuniones.
En la Eucaristía presidida por Mons. Mestre también participó el capellán de la unidad, P. Daniel Climente; la delegada para la pastoral carcelaria, hermana Helena Kuc; miembros de esta pastoral diocesana y autoridades del recinto penitenciario.
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En su homilía, Mons. Mestre dijo a las reclusas que "la palabra libertad es fuerte para todos nosotros, pero aún más para ustedes y es lindo que podamos celebrar esa frase en este contexto de Navidad".
Explicó que el Evangelio "relata que nos ha nacido el Mesías, el Salvador, el que trae la Buena Noticia y es el que nos permite ser auténticamente libres" .
En ese sentido, cuestionó "¿queremos ser libres de verdad?" y luego alentó a que "abramos el corazón a Jesús que quiere nacer en esta vida y en nuestro corazón. Ahí brota la libertad interior que es lo más importante que tenemos, podemos estar adentro y ser libres, podemos estar afuera y no ser libres".
"La libertad que vale la pena es la capacidad de abrir el corazón de Jesús y dejar que hoy nazca en el corazón de cada uno de nosotros, y esto es común para todos los que estamos acá", aseguró el Prelado.
Tras la Eucaristía, las internas y los funcionarios de la cárcel recibieron de parte del obispo un pequeño Niño Jesús confeccionado por una abuela de Villa Gesell y unas tarjetas con mensajes confeccionadas por niños de catequesis de la capilla Madre Teresa de Calcuta.
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