VATICANO,
El Papa Francisco recordó hoy de forma particular el sufrimiento de los migrantes que mueren durante su viaje, como es el caso de las 71 personas encontradas muertas el 27 de agosto dentro de un camión frigorífico, en la carretera entre Budapest (Hungría) y Viena (Austria).
"Por desgracia, en los últimos días muchos migrantes han perdido la vida en su terrible viaje", lamentó el Santo Padre, concluido el rezo del Ángelus dominical, y señaló que "por todos estos hermanos y hermanas, ruego y pido que oren".
Francisco señaló que de forma especial se une al Arzobispo de Viena, Cardenal Christoph Schönborn "y a toda la Iglesia en Austria en oración por los setenta y un personas, entre ellas cuatro niños, que fueron encontrados en un camión en la autopista de Budapest-Viena".
Los 71 fallecidos –posiblemente a causa de asfixia– habrían sido refugiados sirios, según los documentos encontrados con los cadáveres. Además de los cuatro niños, se encontraban ocho mujeres y 59 varones. Las autoridades austriacas sospechan que se trata de un caso de tráfico de personas.
Hasta el momento se ha detenido al dueño del vehículo y a sus dos conductores, que se habían dado a la fuga.
La ministra del Interior de Austria, Johanna Mikl-Leitner, ha pedido tolerancia cero con los traficantes de personas y aseguró que en este caso "se trata de criminales, no de personas que ayudan a los refugiados a alcanzar su meta".
El Papa Francisco señaló hoy que confía a los fallecidos "a la misericordia de Dios; y le pedimos que nos ayude a cooperar efectivamente para prevenir estos crímenes, que ofenden a toda la familia humana".
"Oremos en silencio por todos los migrantes que sufren y por aquellos que perdieron sus vidas", finalizó.
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