MANIZALES,
Cientos de fieles dieron ayer el último adiós a los sacerdotes Jesús Ariel Jiménez Soto y Gabriel Fernando Montoya Tamayo, quienes fueron enterrados en las localidades de Aranazazu y Salamina, en el departamento de Caldas, de donde eran originarios. Ambos presbíteros fueron asesinados en el departamento de Vichada el pasado lunes.
Según informa el diario de Manizales (capital de Caldas), La Patria, fueron cientos los fieles que asistieron a las Misas presididas, la primera en Aranazazu, por el P. Gustavo Jiménez Soto, hermano del presbítero asesinado; y la segunda por Mons. Fabio de Jesús Morales Grisales, Arzobispo Emérito de Mocoa-Sibundoy; y Mons. Álvaro Efrén Rincón Rojas, Vicario Apostólico de Puerto Carreño (Vichada), en Salamina.
"A ambos los asesinaron el lunes en la noche en el corregimiento La Pascua del municipio de La Primavera en el departamento de Vichada. Las versiones recogidas hasta ahora indican que un supuesto robo originó la tragedia que enluta a la Iglesia en Colombia", añade la nota.
En las eucaristías también estuvieron sacerdotes de la comunidad Redentorista de diferentes sitios del país; en representación de la Arquidiócesis de Manizales estuvo Monseñor Luis Enrique Hoyos.
Las Mejores Noticias Católicas - directo a su bandeja de entrada
Regístrese para recibir nuestro boletín gratuito de ACI Prensa.