Un estudio publicado en Acta Paediatrica sugiere que las mujeres que alguna vez abortaron tienen más probabilidades de maltratar a sus hijos, que una que no lo ha hecho.
El estudio fue dirigido por Priscilla Coleman de la Bowling Green State University, quien utilizó información obtenida de una encuesta realizada entre 518 mujeres de bajos ingresos en Baltimore que recibían ayuda a las familias con hijos dependientes y que tenían al menos un hijo menor de doce años.
Coleman usó los datos para comparar las tasas de abuso y maltrato infantil y encontró que las mujeres que se sometieron a un aborto inducido tenían 2, 4 más posibilidades de maltratar a sus niños que las que lo sufrieron involuntariamente.
Los investigadores afirman que “las dificultades emocionales y la respuesta insuficiente al dolor”, originado por un aborto voluntario o involuntario, pueden generar efectos negativos en las mujeres así como en su disposición como madres.
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