El Papa León XIV recordó este miércoles que el pasado sábado 8 de noviembre fue beatificada madre Elisva Vakha’i, religiosa india del siglo XIX y fundadora del Tercer Orden de las Carmelitas Descalzas Teresianas, destacando su compromiso “valiente en favor de la emancipación de las muchachas más pobres”.
“El testimonio de la madre Elisva Vakha’i —afirmó el Pontífice durante los saludos en lengua italiana al término de la Audiencia General— es fuente de inspiración para cuantos trabajan en la Iglesia y en la sociedad por la dignidad de la mujer”.
La ceremonia de beatificación se celebró en la plaza frente a la Basílica-Santuario de Nuestra Señora del Rescate, en Vallarpadam, ciudad de Kochi, en el estado indio de Kerala, y fue presidida por el cardenal Sebastián Francis, obispo de Penang (Malasia).
Ante miles de fieles, religiosos y religiosas de todo el país, el purpurado destacó que la nueva beata representa “un faro de esperanza” para todas las “mujeres consagradas, para todas las madres y para todas aquellas que sufren en silencio y, sin embargo, eligen amar”, según informó Vatican News.
Una mujer, madre y viuda que fue llamada por Dios
Antes de abrazar la vida religiosa, Elisva Vakha’i estaba casada y tuvo una hija. Al quedar viuda, decidió profesar los votos religiosos. Aquella experiencia marcó profundamente su vocación y la dotó de una sensibilidad especial hacia las necesidades de las mujeres de su tiempo. En una sociedad marcada por rígidas divisiones culturales y religiosas, supo reconocer la dignidad de cada persona y ofrecer oportunidades concretas de educación y acogida.