Los Guardias Suizas, que han protegido a los Papas durante los últimos cinco siglos, ahora tienen un nuevo uniforme.
El uniforme, fabricado principalmente de lana, es la recreación de una vestimenta militar histórica para usar en galas y otras cenas importantes y no reemplazará a los icónicos uniformes de “gran gala” de color rojo, naranja y azul por los que son famosos los guardias.
Las prendas, fabricadas en Suiza, fueron financiadas por un benefactor y costaron 2000 euros (unos 2300 dólares) cada una. Según el comandante de la Guardia Suiza, Christoph Graf, representan “un vínculo entre el presente y el pasado”.
Los 135 guardias del ejército más pequeño pero más antiguo del mundo lucen los nuevos uniformes por primera vez en una cena esta noche, antes la noche anterior a la ceremonia del 4 de octubre para juramentar a los nuevos reclutas de este año.
La ceremonia de juramentación, en la que los nuevos guardias prometen proteger al Papa, si es necesario con sus vidas, fue pospuesta de la fecha tradicional del 6 de mayo debido a la coincidencia del cónclave que eligió al Papa León XIV, quien se espera que asista.
El 6 de mayo se conmemora la batalla de 1527 conocida como el Saqueo de Roma, en la que 147 guardias perdieron la vida defendiendo al Papa Clemente VII del ejército amotinado del Sacro Imperio Romano Germánico.