Los fiscales en la isla griega de Syros han presentado cargos por delitos graves contra dos sacerdotes católicos y seis civiles en relación con la presunta malversación y lavado de dinero de más de 3 millones de euros (3,3 millones de dólares) de fondos diocesanos.
Las acusaciones de este mes siguen a una investigación que comenzó a finales de 2024, cuando la Autoridad contra el Lavado de Dinero de Grecia descubrió transferencias financieras sospechosas desde la Diócesis Católica de Syros hacia cuentas vinculadas a operaciones de discotecas, informó el periódico griego Kathimerini.
La investigación descubrió que los fondos de la Iglesia supuestamente fueron desviados a negocios involucrados en prostitución, drogas y esquemas de protección durante ocho años, según ProtoThema.
Los fiscales han acusado a dos sacerdotes católicos junto con seis civiles en relación con malversación que supera los 120.000 euros, complicidad en malversación y lavado de dinero.
El caso gira en torno a un propietario de discoteca de 53 años de Patra. Según los investigadores, el empresario supuestamente utilizó fondos de la Iglesia para subarrendar operaciones de discotecas, actuando como lo que los fiscales consideran el "cerebro" de la trama.
La mala conducta financiera provocó una rápida acción por parte del Vaticano.