A principios de agosto, el presidente Luis Abinader promulgó el nuevo Código Penal de la República Dominicana, una normativa que reemplaza una legislación de más de un siglo y que entrará en vigencia en agosto de 2026.
El texto aprobado incorpora delitos como el “feminicidio”, el sicariato, el ciberbullying (el acoso a través de medios digitales), la violencia económica, las estafas piramidales, la desaparición forzada, los crímenes de lesa humanidad y el genocidio. También amplía las penas máximas hasta 40 años de prisión, e incluso hasta 60 en casos de delitos graves.
Sin embargo, uno de los aspectos más relevantes es que mantiene la prohibición absoluta del aborto, convirtiéndose en un hito para el movimiento provida dominicano.
“Un Código que consagra la inviolabilidad de la vida”
El P. Mario de la Cruz Campusano, Vicario Episcopal de la Pastoral de Familia y Vida de la Arquidiócesis de Santo Domingo, expresó su gratitud por la aprobación y promulgación del nuevo Código Penal.
“Queremos reconocer el gran trabajo de los diputados y senadores en la aprobación de un Código que consagra la inviolabilidad de la vida. De igual modo, agradecemos al presidente Luis Abinader por escucharnos y promulgar esta ley que la inmensa mayoría del pueblo dominicano pedía y necesitaba”, afirmó en un video difundido en redes sociales.