Un tribunal federal de distrito ordenó el 1 de agosto que una clínica médica de Colorado (Estados Unidos) dirigida por dos enfermeras católicas puede continuar su ministerio de reversión de la píldora abortiva, bloqueando parcialmente una ley estatal que buscaba prohibir la práctica.
El juez federal de distrito Daniel Domenico dijo en su fallo del viernes que la prohibición de Colorado sobre la reversión de la píldora abortiva interfería con los derechos religiosos de las enfermeras Dede Chism y Abby Sinnett.
El equipo católico conformado por madre e hija dirige la clínica Bella Health and Wellness en el área de Denver. Parte de sus servicios incluye la administración de la hormona progesterona, que puede contrarrestar los efectos de los abortos químicos.
Colorado prohibió en 2023 la reversión de la píldora abortiva alegando que constituye una “práctica comercial engañosa”. Ese mismo año, las enfermeras demandaron al estado por la prohibición, argumentando que impedía sus creencias religiosas y las de sus pacientes.
Domenico, en octubre de 2023, emitió un bloqueo temporal a la prohibición estatal. Su fallo del viernes hizo que el bloqueo fuera permanente.
“No se disputa que, al prohibirles efectivamente el uso de un tratamiento particular para mujeres embarazadas, esta ley gravaba las creencias religiosas sinceramente sostenidas [de las enfermeras]”, escribió el juez.