A pocos días de su fallecimiento el 21 de abril, el Papa Francisco designó al Cardenal Kazimierz Nycz, Arzobispo emérito de Varsovia, como su enviado especial para las celebraciones del centenario de la Arquidiócesis de Katowice, en Polonia.
En una de sus últimas cartas oficiales fechada el 13 de abril, Domingo de Ramos, el pontífice argentino destacó la importancia espiritual y social de esta comunidad y confió al Cardenal Nycz la misión de representarlo en el histórico evento el próximo 11 de junio en la Catedral dedicada a Cristo Rey, en la ciudad de Katowice.
Indicó que su delegado se encargará de celebrar “los sagrados ritos en nuestro nombre, y exhortando al Pueblo de Dios sobre la necesidad de anunciar y transmitir el Evangelio.”
Acompañando al purpurado, la misión pontificia estará integrada por los sacerdotes polacos Łukasz Gawel y Damian Wojtyczka.
“El pueblo de Polonia, que habita la Alta Silesia, resplandece con la labor del Evangelio. Alaba a Dios por los innumerables dones recibidos y se acoge a la protección de la Bienaventurada Virgen María invocada en Piekary bajo el título de Madre de la justicia y del amor social”, resaltó Francisco al inicio de su misiva.
Subrayó también el valor del trabajo del pueblo local: “Este pueblo manifiesta un profundo sentido de la dignidad del trabajo humano, a través del cual cada cristiano se une religiosa y devotamente a Cristo cada día con mayor intensidad”.