El Papa León XIV, el primer Papa proveniente de la Orden de San Agustín (OSA), visitó al inicio de su pontificado el Santuario de la Madre del Buen Consejo en Genazzano, Italia, cerca de Roma. El recinto alberga una famosa imagen de la Virgen María que, según la tradición, se apareció allí en circunstancias milagrosas.
Conocida con el título de "Nuestra Señora del Buen Consejo" o "Madre del Buen Consejo", la pequeña imagen de la Virgen María que se conserva en la iglesia de Genazzano ha sido venerada por los agustinos durante siglos. Los Agustinos del Medio Oeste, que el Papa León dirigía como prior provincial antes de su elección, supervisan la Provincia de Nuestra Madre del Buen Consejo.
Durante su visita a la iglesia el 10 de mayo, León habló de la protección de la Virgen María y de la importancia de la devoción a Ella. Rezó en el altar y ante la imagen mariana, y también elevó una oración a la Madre del Buen Consejo con la asamblea.
“Como la Madre nunca abandona a sus hijos, también ustedes deben ser fieles a la Madre”, afirmó el Papa León.