“La esperanza es el esqueleto que vertebra toda la vida del Papa Francisco y es el hilo que sostiene toda esta larga narración, incluso en las páginas en las que cuenta verdaderos horrores”. El editor italiano Carlo Musso, quien firma el libro Esperanza junto a Francisco, es rotundo cuando habla de esta virtud teologal fundamental en la vida del Pontífice.
El volumen iba a ser publicado después de la muerte del Santo Padre, pero en el último momento cambió de opinión. “Su idea era publicar un libro póstumo, pero entonces llegó el Jubileo de la Esperanza que se convirtió en una ocasión propicia para sacarlo a la luz”, agrega.
El Santo Padre deja claro en el volumen la gran diferencia entre el optimismo —algo más pasajero, que puede estar hoy y mañana no— y la esperanza, que entiende como una potencia activa.
El volumen es el fruto de seis años de proceso -hasta hace muy poco secreto- para poner por escrito las memorias del Santo Padre. “En la autobiografía, el lector podrá asomarse obviamente a su vida personal, su vida sacerdotal y a todo el pontificado. Pero se ve claramente que la esperanza ha sido el pegamento que los mantuvo unidos, porque incluso en las dificultades, en la tragedia, el Papa Francisco siempre lanza un mensaje de esperanza concreto e invencible”, manifiesta.
Esperanza acopia así conversaciones, mensajes y textos que el Santo Padre le proporcionó. “Después redacté un primer borrador al que siguió un trabajo de verificación común”, detalla Muso, que deja claro que el Pontífice nunca rehuyó ningún tema: “Da libertad absoluta, sin líneas rojas”.
“Este periplo arrancó en 2019 y terminó finalmente a principios de diciembre de 2024, cuando el Papa creó 21 nuevos cardenales que una vez más demostraron su visión de una Iglesia universal”, explica.