El Obispo de San Cristóbal (Venezuela), Mons. Mario Moronta, reiteró la voluntad de la Iglesia en el país de promover espacios de encuentro que permitan alcanzar la paz; en ese sentido, dijo que fieles y sacerdotes están llamados en este tiempo de Cuaresma a "cooperar con la paz" y la reconciliación de todos los venezolanos.
"Repudiamos todo acto de violencia, cuyo saldo es de muertos y heridos", expresó el Prelado ante la violencia ocurrida el fin de semana en Táchira, región donde se encuentra su Diócesis y donde se iniciaron las protestas contra el régimen de Nicolás Maduro.
En ese sentido, pidió a las autoridades que "cumplan su deber de mantener el orden público y proteger a los ciudadanos, pero sin excesos ni acciones que vayan en contra de los derechos humanos fundamentales; que se rijan por las disposiciones legales del sistema jurídico nacional e internacional".