La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, en una reciente carta circular, anunció que la ubicación del signo de la paz dentro de la Misa no cambiará, pero sugirió varias formas en la que el rito podría ser realizado con mayor dignidad.
En un comunicado difundido el 28 de julio, el secretario general de la Conferencia Episcopal Española, P. José María Gil Tamayo, indicó a los obispos locales que "la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos se pronunció a favor de mantener el 'rito' y el 'signo' de la paz en el lugar en el que está ahora en el Ordinario de la Misa".
El P. Gil Tamayo anotó que esto fue hecho porque el rito de la paz es "característico del rito romano" y por "no creer que sea adecuado para los fieles introducir cambios estructurales en la Celebración Eucarística en este tiempo".