El Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Pietro Parolin, advirtió este lunes que un estado omnipresente que busca controlar todo es ineficaz e injusto, pues corta toda creatividad; en cambio, señaló que un estado sanamente laico es aquel que protege y promueve la acción social de la Iglesia a favor del bien común.
Así lo expresó durante el "Coloquio México-Santa Sede sobre Migración Internacional y Desarrollo", que finaliza este martes y donde llamó a la comunidad internacional y a los miembros de la Iglesia a trabajar para afrontar el fenómeno de las migraciones, en especial el drama de los niños que cruzan ilegalmente la frontera de Estados Unidos huyendo de la pobreza y violencia en sus países de origen.
"Cuando la Iglesia encuentra un interlocutor receptivo, un Estado convencido de su vocación de servicio a las personas y, por tanto, no meramente 'tolerante' con el hecho religioso, sino dispuesto a promover cualquier instancia que trabaje por mejorar la sociedad, la potencialidad del bien realizado se multiplica y el tejido social se impregna de humanidad", afirmó el Purpurado.