Al presidir la Misa por la fiesta de San José Obrero en la parroquia del mismo nombre en sus 50 años de fundación, el Arzobispo de Rosario (Argentina), Mons. José Luis Mollaghan, señaló que el trabajo contribuye a orientar la actividad humana hacia Dios.
"El trabajo es necesario para que los bienes de la tierra sean útiles a la vida de los hombres y a la sociedad, y también contribuye a orientar la actividad humana hacia Dios, en el cumplimiento de su mandato `sometan la tierra´", expresó el Prelado.
Recordó además que San José, elegido por Dios, sacó adelante el hogar de Nazaret como carpintero; por eso "nos unimos en esta celebración al día del trabajo y saludo a quienes trabajan, para su propio bien y el de su familia, porque engrandecen la sociedad que se beneficia con sus frutos y responden por los talentos recibidos dando gloria a Dios", dijo.