El provincial de Medio Oriente de la Compañía de Jesús, Padre Víctor Assouad SJ, firma un comunicado en el que "expresa su profundo pesar e inquietud por la suerte de los que se han involucrado en la tragedia del conflicto sirio".
Además del Padre Paolo Dall'Oglio –el jesuita romano que desapareció en el norte de Siria desde hace una semana y que tal vez fue secuestrado por grupos jihadistas que actúan en el área–, el Padre Assouad se refiere también a la situación crítica que están viviendo el Padre Frans van der Lugt y las personas que viven con él en la residencia jesuita de Boustan Diwan, en el centro de la ciudad de Homs, en donde, según fuentes de la UNICEF, 400 mil civiles (la mayor parte mujeres, ancianos y niños) permanecen bloqueados y aislados debido a la nueva ofensiva del ejército gubernamental en contra de las milicias rebeldes.
En su nota, además, el provincial jesuita de Medio Oriente agradece "a todos aquellos que se preocupan por su destino, así como las jurisdicciones y las autoridades que están haciendo todo lo posible para encontrarlo".