La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos publicó hoy un decreto que autoriza a celebrar el 25 de enero 2009, tercer domingo del tiempo ordinario, la Fiesta de la conversión de San Pablo.
El decreto, firmado por el Cardenal Francis Arinze, Prefecto de ese Dicasterio y por el Secretario, Arzobispo Albert Malcolm Ranjith, explica que la autorización se debe a la celebración del Año Paulino, que inaugurará el Santo Padre el próximo 28 de junio, para conmemorar los dos mil años del nacimiento del Apóstol de Gentes.
De no haberse dado el decreto vaticano, el año 2009 no se habría celebrado la fiesta de la conversión de San Pablo.